El maestro Nelson Pereira dos Santos hubiera cumplido 90 años el 22 de octubre; lamentablemente falleció en Río de Janeiro el 21 de abril del año en curso.
Tuve la suerte de haberlo conocido en 1999, en RJ, conservo hermosos recuerdos de este encuentro y de los sucesivos encuentros, así como de los homenajes que le hicimos en Nápoles, Roma y Génova (2003).
Nelson Pereira dos Santos, considerado el padre del Cinema Novo (argumento de mi tesis) fue una figura clave no sólo del cine brasileño sino del cine latinoamericano. Su amplia filmografía está “contaminda” de literatura, sobre todo de autores como: Graciliano Ramos (su padre literario), Guimarães Rosa, Jorge Amado, Machado de Asis, Nelson Rodrigues, entre otros.
Gracias a Nelson pudimos conocer el sertão, en su film “Vidas Secas” (basada en la homónima obra de Graciliano Ramos), nos mostró a todos la posibilidad de hacer un cine diferente en Brasil.
El talento de Pereira dos Santos fue recononocido en numerosos festivales internacionales, entre ellos el Festival de Cannes y el Festival de Berlín. Fue homenajeado en muchísimos países, en 2006 fue nombrado miembro de la “Academia Brasileira das Letras”: fue el primer cineasta elegido para ocupar el sillón número 7, antes ocupada por Sergio Correia da Costa, y por personajes de primer nivel: Euclides da Cunha, Valentim Magalhães, Castro Alves, João Guimarães Rosa, Jorge Amado, entre otros; pero más allá de premios, homenajes y reconocimientos, su figura perdurará en el tiempo por su sensibilidad, por su cultura, por su influencia como cineasta y por su moral intachable.
A quienes no pudieron ver su último docufilm, les invitamos a ver “A Luz de Tom Jobim”, sobre el genial compositor, músico y cantante brasileño Antonio Carlos Jobim.